«En un taller de artesanía no se pueden elaborar bocadillos, pero en Lomax hacemos verdaderas obras de arte». Esta es la premisa que reza en las cartas y en la pared de la Bocatería Lomax. Con esta ambición y ganas de mostrar lo que saben hacer abrieron el establecimiento Julia y Toni. El nombre del local es un homenaje a su único hijo, el pequeño Max. En él, Toni demuestra lo que aprendió en la bocatería de su familia en Argentina y comparte recetas que son imposibles de encontrar en ningún otro lugar en la isla. Interior de la bocatería. En esta bocatería tienen cinco especialidades. Los tostados o carlitos se preparan con un pan de molde de un tamaño tres veces superior al habitual, para ello se ha realizado un molde especial y se ha contactado con un panadero argentino que prepara este tipo de pan únicamente para Lomax.Cordobés completo. Dentro de la gama de bocadillos, triunfan el Lomax (con ajíes en vinagre). el Carmelo y el Bambino. En la selección de solomillos, que se preparan con llonguets, el más solicitado es el francés, con queso roquefort. Los famosos tostados. Con un pan de hamburguesa especialmente dulce se preparan propuestas como el Tucumano o el Pampeano. La quinta especialidad son las milanesas, de entre las cuales ha tenido gran aceptación el Cordobés completo. El bocadillo Lomax.